Es un placer iniciar el primero de muchas publicaciones de nuestro blog. Hace tiempo hemos querido hacerlo pero habíamos estado enfocados en lo primario: sacar adelante este proyecto ciudadano tan importante para la ciudad y ambiente. Hoy queremos iniciar este espacio para contarles cómo es el proceso para hacer realidad este proyecto y las múltiples capas de complejidad y trabajo responsable que hemos venido llevando ciudadanos y profesionales de diversas disciplinas para asegurarnos considerar todos los elementos.
Agradecemos a las personas que nos han expresado algunas inquietudes sobre Rutas Naturbanas, ya que esto nos da la oportunidad de comentar acerca de todo el trabajo arduo y extenso que hemos venido realizando durante los últimos años para poder iniciar la construcción de un proyecto tan ambicioso como este. Son estos intercambios los que nos recuerdan nuestra obligación de comunicar e invitar al colectivo a ser parte de este proceso y la importancia de ser transparentes en este proceso de creación comunitaria.
Todo el trabajo de la Fundación se ha hecho y se seguirá haciendo bajo todos los mecanismos que establece la legislación. Siempre hemos procedido de la mano de instituciones públicas y privadas para obtener todos los permisos ambientales y de construcción respectivos, que como todo proyecto costarricense debemos presentar.
Rutas Naturbanas nació como una iniciativa ciudadana que gracias al apoyo de miles de costarricenses recibió el interés y apoyo de 4 ministerios de la República, obteniendo así la declaratoria de interés público en el 2017 (Decreto Ejecutivo N° 39762-MOPT, MINAE, MSJ-S). Es nuestro compromiso por lo tanto, de rendir cuentas, actuar bajo los procedimientos respectivos y mantener comunicación con estas instituciones y las demás que estén involucradas. Además, estamos muy orgullosos de poder decir que muchas empresas del sector privado y ciudadanía -con más de 100 voluntarios- se han interesado por la propuesta y también nos han ofrecido su colaboración.
Toda obra o construcción en nuestro país debe contar con un aval de viabilidad ambiental para poder llevarse a cabo, el cual es supervisado por la Secretaría Técnica Ambiental (SETENA). Esto conlleva realizar una gran variedad de estudios integrales como de ingeniería, hidrológicos, geológicos, biológicos, entre otros, y en este primer kilómetro, por ejemplo, hemos contado con el apoyo de empresas como HSolís, ISR, Geomeka, IIG y Carbón Ingeniería para su realización. Es así que Rutas Naturbanas siempre contará con los permisos respectivos antes de cada proceso constructivo.
Así bien, siempre actuamos bajo las recomendaciones técnicas de profesionales con experiencia y alta calificación sobre aspectos de factibilidad y estrategias de mitigación, prevención y demás. Cabe resaltar que el proyecto nunca pasará por terrenos donde se comprometa la integridad ambiental o de las personas que lo transiten. Por esto, muchas veces tendrá tramos y conectores lejos de la zona de ribera según las recomendaciones ambientales y de ingeniería que así lo dicten. En zonas donde sí se utiliza la ribera, se ha trabajado muy de cerca con el Sistema Nacional de Áreas de Conservación para asegurar el resguardo de estos espacios.
La Fundación Rutas Naturbanas además cuenta con la colaboración de biólogos e ingenieros forestales que durante más de 3 años trabajan en inventarios forestales y de fauna a fin de confirmar la viabilidad del proyecto y recomendar estrategias de mitigación y compensación. Como bien lo indica nuestra meta y visión, todo el proyecto carecería de sentido sin una estrategia intensiva de rehabilitación de la cobertura vegetal del río, donde no sólo ejecutaremos programas de reforestación sino también del manejo de especies exóticas e invasoras que hoy lamentablemente dominan muchísimos tramos del río como lo son el bambú (Bambusa sp) y pasto elefante (Pennisetum purpureum). Esto según los mismos estudios que hemos realizado.
Un ejemplo de esta situación se refleja en la región donde se ubicará el primer kilómetro de la ruta, donde cerca del 25% del terreno está dominado por estas especies invasoras que impiden el crecimiento de bosque nativo y todos sus servicios ecosistémicos. Este mismo tramo posee cerca de un 30% de charrales muy jóvenes que requieren también intervención para continuar su sucesión natural y 10% son áreas abiertas. Es decir, por mucho, más de la mitad del terreno no tiene cobertura boscosa nativa, lo cual se repite una y otra vez a lo largo de la zona protectora del río. La propuesta del Primer Km incluye una ambiciosa regeneración de la capa vegetal.
Rutas Naturbanas es un catalizador para el desarrollo de los corredores biológicos interurbanos de la capital, un programa fundamental que nació gracias al trabajo de diversas instituciones y organizaciones públicas y privadas preocupadas por la conservación de los ecosistemas urbanos. Desde un inicio nos propusimos ser parte de esta importante iniciativa, trabajamos con ellos y nuestra mayor contribución será la de implementar estrategias intensivas de rehabilitación en ambos lados de la ribera para recuperar la cobertura vegetal nativa. Esto será de gran beneficio para el río y las cientos de especies de aves, mariposas, abejas, basiliscos o los emblemáticos osos perezosos que viven en dichos ecosistemas urbanos.
Somos conscientes también sobre inquietudes que ciudadanos nos cuentan acerca de riesgos en salud por el paso a orillas del río. Si bien el nivel de exposición de los transeúntes no sería más que el que experimentamos todos los visitantes y habitantes de San José, Rutas Naturbanas también apuesta por una estrategia de descontaminación distinta. Abarcar una problemática de basura y contaminación tan grande y compleja como el que experimentan nuestros ríos urbanos requiere de un gran interés e integración participativa a nivel comunitario. Por algo esta situación no se ha podido solucionar a través de tantas décadas en nuestro país, a pesar de los muchos esfuerzos que se han realizado.
Como con nuestros parques nacionales, creemos en la apropiación del espacio urbano natural para promover estas iniciativas y con ello apoyaremos a proyectos actuales y comunidades en su derecho por disfrutar de ríos limpios en la capital dándoles valor, apropiación y cuido. Dar acceso a la ciudadanía permite una vigilancia permanente del medio ambiente, de descargas ilegales de desechos sólidos y líquidos así como de observancia y prevención de invasiones constructivas en la zona de retiro.
Estamos orgullos de poder afirmar que cada proceso y accionar que hemos llevado a cabo ha sido producto del trabajo y colaboración de un asombroso equipo capacitado y multidisciplinario. Muchas personas nos han preguntado por qué hemos tardado tanto para poder iniciar la construcción y efectivamente se debe a que hemos venido trabajando muy cuidadosamente en todos estos temas de índole ambiental, legal, socioeconómico y de construcción. Nuestra meta más importante es y será que Rutas Naturbanas sea un proyecto que se realice para el bienestar humano y del medio ambiente, que nos permita contar con espacios naturales y conectar a las personas con la ciudad a través de la naturaleza.
Jossy Calvo Villalobos, Biólogo para la Fundación y Consultor Ambiental inscrito en Setena